Sombras de agua. Félix G. Modroño

SOMBRAS DE AGUA

FÉLIX G. MODROÑO

ALGAIDA EDITORIAL

352 PÁGINAS

 

 

SINOPSIS

 

En el invierno de 1684, el doctor Zúñiga parte desde Valencia con destino a Venecia para cumplir con una importante misión diplomática. Sin embargo, sus dotes como investigador han traspasado fronteras y el dux le encarga que averigüe lo que se esconde detrás de un mensaje anónimo que amenaza con el hundimiento de la ciudad. Para ello contará con la ayuda de Elena Corner Piscopia, la primera mujer reconocida con un doctorado universitario, quien ha organizado una reunión de científicos para debatir sobre la vigencia del pensamiento de Aristóteles. A ella acudirán desde Newton o Halley hasta Leibniz. Inmerso en una Venecia fría y brumosa, marcada por los carnavales y la música, y con las mentes más brillantes de Europa a solo unos pasos de él, el doctor Zúñiga vivirá una de las experiencias más apasionantes de su vida.

 

Sombras de agua es la tercera entrega de las aventuras del doctor Zúñiga y la primera en la que viaja fuera de España para cumplir misiones. A don Fernando de Zúñiga, vizconde del Castañar y doctor en medicina por la Universidad de Salamanca, lo conocemos en La sangre de los crucificados, la primera novela de la serie. Y en Muerte dulce continuamos conociendo su trabajo investigador, siempre acompañado por el joven Pelayo.

 

Las sagas siempre es mejor leerlas desde el principio para no perdernos detalles importantes, a la vez que seguimos la evolución de los protagonistas. En este caso se puede empezar perfectamente por esta y seguir la historia sin ninguna dificultad, solo que peligra el quedarse con ganas de conocer más a fondo a Pelayo y al doctor Zúñiga. Son unos personajes carismáticos que conquistan a los lectores. Y otra ventaja de seguir el orden de la serie es la notable mejoría en las obras.

 

Don Fernando de Zúñiga es famoso por sus intervenciones a la hora de descifrar misterios. Su olfato para resolver asesinatos es conocido por todos y la península ibérica se le queda pequeña. En esta ocasión el doctor y su inseparable mozo se encuentran en Valencia, preparados para navegar hasta Venecia para cumplir con la misión encomendada por la reina Mariana de Austria. A punto de partir hacía la ciudad de los canales, el arzobispo intentará retenerlo para esclarecer el robo del santo cáliz. Pero el doctor no puede perder el tiempo, tiene que llegar cuanto antes a Venecia y reunirse con el dogo, un señor mayor, con quien debe tratar la alianza de las naciones católicas para terminar con la amenaza turca.

 

Venecia se convierte en una ciudad inquietante para los dos investigadores. El dogo les enseña una nota encontrada, lo que parece ser una conspiración para hundir la ciudad. Por primera vez no van a trabajar solos, les acompañará Elena Corner Piscopia, la primera mujer doctorada. Elena enseñará al doctor los canales, las leyendas y la historia de la ciudad.

 

Asesinato tras asesinato inquietan al doctor a la vez que no le dan respiro. Entre científicos reunidos por Elena Corner, para un congreso sobre el pensamiento de Aristóteles, encontramos una trama compleja que abarca historia, religión, ciencia y poder. El autor conjuga muy bien los personajes reales con los ficticios, adapta muy bien las situaciones y el tiempo para que las piezas encajen a la perfección. Se nota el gran trabajo de estudio para transportarnos a la Venecia del siglo XVII, disfrutando de sus oscuras y nebulosas calles, los paseos en góndola por los canales, sus edificios y tradiciones. Una cultura totalmente diferente a las costumbres españolas a las que estaba acostumbrado Zúñiga. Una ciudad que vive el carnaval, dónde cualquiera puede esconderse detrás de una máscara.

 

Sombras de agua es una novela llena de misterios que intrigan al gran investigador. Una carrera sin tregua para resolver un caso de lo más complejo. En esta novela encontramos a unos protagonistas más maduros, en los que los miedos del pasado parecen desaparecer para dar rienda a nuevas pasiones.

 

A través de 49 capítulos conocemos a La Serenísima República de Venecia que se convierte en una protagonista más. La narración histórica, de Modroño, nos ofrece una muy buena novela de ficción y realidad, que de forma sencilla y sin agobiar con datos enseña una historia bastante desconocida. Se nota mucho el progreso de esta novela respecto de la primera, con un lenguaje simple y acorde a la época sin utilizar un vocabulario tan rústico, lo que agiliza la lectura.

 

Zúñiga y Pelayo son dos personajes entrañables que conquistan a los lectores. Dejad que don Fernando os enamoré con un soneto del gran Garcilaso de la Vega.