PEORES MANERAS DE MORIR
FRANCISCO GONZÁLEZ LEDESMA
BOOKET
EDITORIAL PLANETA
375 PÁGINAS
SINOPSIS
El brutal asesinato de dos chicas en el barrio del Raval pone en alerta al inspector Méndez, a quien no le falla el olfato para tirar del hilo y descubrir que, detrás de tal atrocidad, se oculta una sórdida organización dedicada al tráfico de bellas mujeres eslavas.
Peores maneras de morir es el retrato social de una Barcelona que está cambiando, en la que los ideales del pasado han desaparecido y, tal vez, el viejo policía lo haga con ellos.
Durante meses leí reseñas de esta novela de Francisco González Ledesma, un autor desconocido para mí, con el que me estreno gracias al Club de novela negra. Toda una sorpresa el encontrarme con una obra muy negra, que engancha desde el inicio, protagonizada por el inspector Méndez. Reconozco que no conocía al autor, sólo por las reseñas de "Peores maneras de morir" y resulta que ésta es la undécima entrega protagonizada por este inspector, además que el autor ha publicado muchas obras y en 1984 consiguió el Premio Planeta con "Crónica sentimental en rojo" tercer libro de la serie.
La novela transcurre en Barcelona, en el barrio del Raval. Es aquí dónde una joven intenta escapar a su perseguidor ocultándose entre la gente que pasea por las Ramblas, hasta que se adentra en un viejo edificio y llama a una puerta. Cuando le abren es demasiado tarde, ya la mataron y también se cargan a la chica que le abre.
Muy pronto Méndez relaciona la muerte de las dos jóvenes con la trata de blancas. Por su cuenta seguirá investigando después de ser alejado del caso por el jefe de homicidios. Méndez es un inspector mayor que casi siempre estaba de acuerdo con las mujeres de la calle, y que tiene el defecto de no olvidar a los muertos.
"Pero la trata de blancas es un fenómeno internacional que mueve grandes intereses y cuesta la vida a centenares de mujeres que solo han cometido dos pecados: tener hambre y tener esperanza".
Además de Méndez nos encontramos con Eva Ostrova que es una chica extranjera víctima de los mafiosos, engañada y violada, que consigue escapar y será la encargada de hacer justicia con la organización que le arrebató una vida placentera. Las situaciones que viven estas chicas a las que engañan con la idea de encontrar una vida mejor es difícil de imaginar, imposible sentir lo que viven en sus propias carnes, humillaciones y aberraciones propias de bestias inmundas sin cerebro ni sentimientos. Con dieciséis años Eva vivió lo impensable y al escapar está dispuesta a matar uno a uno a todos los integrantes de la organización, los crímenes tienen delito, que momentos más angustiosos pasé imaginando las escenas. Sinceramente un merecido para esos individuos y es que por un momento nos alegramos de que Eva les pague con la misma moneda, aunque sabemos que eso no son formas y que la justicia debería actuar. La ley no es perfecta y en casos de personas sin documentos lo único que realizan es la expulsión del país.
Al no leer las otras novelas de la serie no puedo comparar el papel y la evolución del inspector Méndez. En esta novela conocemos pocos detalles de su vida, como que es un apasionado de las piernas de las mujeres, que es un policía de la vieja escuela, de la época franquista con pasado y sin futuro. Méndez todo el tiempo investiga desde la calle, porque según él la calle es la enseñanza de la vida. Y las calles junto a sus habitantes forman una sociedad, en este caso la del barrio chino de Barcelona que se convierte en otro gran protagonista. Otros personajes que encontramos en la novela son: Patri una exprostituta, Muller el capo de la operación, Mónica Arrabal una gran dama católica que hace donaciones caritativas, un policía corrupto...
El autor no profundiza demasiado en los personajes, deja que sea la ciudad la importante y así entender los comportamientos de los protagonistas. En esta obra las mujeres demuestran ser muy valientes y gozar de una gran fortaleza. De víctimas a asesinas y cómplices.
Una novela muy bien documentada y escrita con garra para profundizar sin miedo en un tema muy delicado como es la trata de blancas. La historia empieza fuerte con los dos cadáveres y sigue en auge en las siguiente páginas, hasta que al final el ritmo es vertiginoso. La novela consta de 54 capítulos cortos que agilizan la lectura. Una trama muy negra y muy dura que hace pasar momentos angustiosos y de tensión.