Estricnina. Mercedes Sáenz Blasco

ESTRICNINA

MERCEDES SÁENZ BLASCO

ÉMEPE. MUNDOPALABRAS

339 PÁGINAS

 

 

SINOPSIS

 

A los once años, Ignacio descubre que el cura al que ayuda como monaguillo asesinó a su madre. Tras vengarse de él decide conjurar los remordimientos que le corroen bajo una existencia anodina. Cuatro décadas más tarde, cuando cree haberlo conseguido, el azar le coloca de nuevo frente a los interrogantes que aquel día no quiso plantearse. Comienza así su ineludible viaje hacia un pasado sin cicatrizar, en el que nada ni nadie fueron lo que parece. ¿Acaso él tampoco?

 

 

Sentí curiosidad por "Estricnina" desde que conocí su existencia por las redes. Las drogas enganchan o matan, a veces las dos cosas. En mi caso, "Estricnina" me enganchó con la intriga del pasado y las muertes que aparecen en la historia. Una muy buena novela de una autora novel a la que es mejor no perder la pista. Si con la primera obra es finalista del 34º Premio Felipe Trigo, las siguientes pueden ser un exitazo.

 

"A los once años yo era un niño huérfano de madre. Mantenía intactas, sin embargo, la sonrisa y la inocencia. Pero leer aquella carta me convirtió en el hijo de una mujer asesinada y vengar su muerte, en un homicida".

 

"Estricnina" comienza fuerte, con Ignacio echando fuego y palabras por los hechos que le queman por dentro. Nachete descubre que don Andrés, el cura, es el asesino de su madre. No lo piensa dos veces y decide vengarse de él, aprovechando que es su monaguillo y mano derecha, para crear una encerrona y darle su merecido a la rata. Estricnina es un gran manjar para las ratas. Este suceso convierte a Ignacio en una persona gris, llena de remordimientos y anclada en su pasado.

 

Casi cuarenta años después, es un hombre separado y un español más en el paro. En la Escuela Oficial de Idiomas se reencuentra con Adeline, una niña francesa que veraneaba en Logroño. Ella tira del pasado y la herida sin cicatrizar de Nachete sangra otra vez. Le incita a buscar una cajita que escondieron de niños y con ella llegan los sobresaltos, los descubrimientos y los recuerdos.

 

 

Estricnina se compone de dos hilos temporales, uno actual y otro del pasado narrados en primera persona por Ignacio. En la actualidad el protagonista no es tan inocente y vemos su progreso con el transcurso de los sucesos y el descubrimiento de la verdad. Necesita el perdón para saldar sus remordimientos y conocer los motivos por los que el cura mató a su madre. Esta parte de la novela es más irónica y flojea un poco con Adeline, una mujer prepotente que cambia el rumbo de Ignacio. Es difícil entablar buenas migas con ella y su historia es necesaria para conocer el pasado, pero no es tan lograda ni engancha tanto, es menos creíble. En cambio, la historia del pasado es una maravilla, mucha intriga, rencor, apariencias y asesinatos que enganchan hasta el final. Una trama muy bien elaborada, algunas relaciones son previsibles, pero no impiden disfrutar de la historia. Además esta parte es muy entrañable con la infancia de Nachete ejerciendo de monaguillo de don Andrés, las calles de Logroño, las vecinas cotillas y beatas.

 

Mérida y Logroño son las dos ciudades donde transcurre la trama de la novela. A Mérida no tengo el gusto de conocerla, y por Logroño pasé haciendo el Camino de Santiago mencionado por la autora en la obra. Todo visitante conoce la Calle Laurel, famosa por sus bares. Emocionante recordar parte del viaje y más entrañable cuando descubrimos la ciudad de principios de los setenta. Las calles donde jugaban los niños, la sacristía, el cura y el monaguillo. Una imagen de pueblo que me recuerda al mío, el gran cariño que teníamos al párroco y a los sábados de catequesis que terminaban con las chicas de monaguillas si faltaban chicos.



 

"Pero el pasado es inmutable y el único modo de seguir adelante es asumirlo, convivir con él aunque duela y airearlo de vez en cuando para que no se apolille entre los recuerdos y acabe pudriéndonos el alma".

 

Estricnina es una novela de valores y venganzas donde los miedos y los secretos silencian la verdad. Una novela muy agradable de leer y que os recomiendo. Lectores, cuidado que el pasado siempre regresa y la estricnina puede ser mortal. Que la lectura os pille confesados ;)

 

Agradezco a la autora el envío del ejemplar.