viernes, 4 de febrero de 2022

Hierro fumando. Jesús Marchamalo

 HIERRO FUMANDO 

JESÚS MARCHAMALO 

ILUSTRACIÓN: ANTONIO SANTOS 

NÓRDICA LIBROS 

56 PÁGINAS  



SINOPSIS

Jesús Marchamalo y Antonio Santos nos traen un nuevo volumen de las biografías que dedican a sus escritores y escritoras más queridos. «Bajaba cada mañana a escribir a un bar, debajo de su casa, de azulejos marrones, La Moderna. Se sentaba frente a la barra en una silla de escay rojo y patas niqueladas, al lado de una máquina tragaperras, modelo Santa Fe, que emitía una constelación de campanillas –¡tling¡, ¡tling!, ¡tling!–tentadora, ruidosa y bullangera. Le traían sin preguntar, un chinchón seco un poco aguado, en copa, y se encendía un pitillo: un Ducados que acababa convertido en humo espeso, acogedor como la niebla, opaco, y que le acabaría quemando los pulmones».


En abril es el centenario del nacimiento del poeta José Hierro. Por ello, Jesús Marchamalo y el ilustrador Antonio Santos le dedican esta nueva minibiografía como homenaje. Para ayudar a recordar a su persona y especialmente a su obra. 

Hierro nació en Madrid y a los pocos años la familia se trasladó a Santander. En sus primeros versos encontramos recuerdos, muy dolorosos, por la influencia de la guerra que lo llevó hasta la cárcel al ser detenido y acusado de pertenecer a una red clandestina de ayuda y socorro a los presos. Entre rejas aprovechó para escribir poemas influenciado por autores como Dickens, Darío, Dostoievski y su amigo Juan Ramón Jiménez.





José Hierro era un escritor de costumbres. Cada día escribía desde el bar, sentado frente a la barra donde le servían siempre lo mismo. Su figura confusa con el humo del Ducados daba un aire misterioso y gótico a ese señor escribiendo que casi formaba parte del mobiliario. Tuvo una vida intensa donde sacaba tiempo para la familia, la escritura, los amigos y el viñedo además de tener un buen cargo en la Editora Nacional.

Su gran adicción fue el tabaco, el cual no dejó en ningún momento a pesar de las recomendaciones médicas. Parece anecdótico, pero con una bombona de oxígeno se le seguía viendo sujetando un cigarrillo.

Sus versos consiguieron los mejores premios literarios españoles: el Príncipe de Asturias, el Nacional de las letras y el Cervantes. Llegando a ser elegido miembro de la Real Academia. Alguien con todos estos reconocimientos merece ser más conocido y que se hable más de sus publicaciones. Es una lastima tener que llegar a un centenario, sea de nacimiento o defunción, para recuperar su legado. 

Hierro conocía de primera mano la poca concurrencia que acaparan los actos de presentación literaria. Y más cuando se trata de un poemario, por ello cargaba rotuladores de colores o acuarelas para dejar constancia de una dedicatoria bien personalizada a sus lectores. Esta dedicación y agradeciendo es algo característico en Jesús Marchamalo, autor de esta biografía. En sus firmas es normal verlo dibujar sombreros con sus acuarelas o regalar chapas o cerezas. Gestos muy bonitos con sus lectores. Yo guardo con mucho cariño mi ejemplar de "Tocar los libros" firmado.

Marchamalo y Santos forman un gran equipo para Nórdica. Sus biografías ilustradas son un trampolín maravilloso para conocer breves pinceladas de la trayectoria de autores y saltar a las profundidades de sus obras. Anteriormente leí "Delibes en bicicleta" y "Virginia Woolf, las olas" y son pequeñas obras de coleccionista. No serán los últimos en aparecer por aquí.



4 comentarios:

  1. Interesante para conocer más a este gran poeta.
    Besotes!!!

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  2. Me encantaaaaaaaaaa. Adoro a Jesús Marchamalo pero al poeta no lo conocía, así que me viene genial este libro. Besos

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  3. Qué triste que un poeta tan laureado y reconocido haya caído casi en el olvido. Qué necesaria esta biografía y qué lujazo contar con Marchamalo. Besos.

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  4. Hace días que tengo fichadas las biografías de Marchamalo porque es un autor que me encanta, y este libro sería perfecto para descubrir además a Hierro, que a estas alturas no he leído nada suyo.
    ¡Besos!

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La palabra es el arma de los humanos para aproximarse unos a otros (Ana María Matute).