El manuscrito de piedra. Luis García Jambrina

 EL MANUSCRITO DE PIEDRA

LUIS GARCÍA JAMBRINA 

ALFAGUARA EDITORIAL

380 PÁGINAS 

SINOPSIS

A finales del siglo XV, Fernando de Rojas, estudiante de Leyes en la Universidad de Salamanca, deberá investigar el asesinato de un catedrático de Teología. Así comienza una compleja trama en la que se entremezclan la situación de los judíos y conversos, las pasiones desatadas, las doctrinas heterodoxas, el emergente Humanismo, la Salamanca oculta y subterránea y la Historia y la leyenda de una ciudad fascinante en una época de gran agitación y cambio.

En su recorrido, Rojas tendrá que resolver algunos enigmas y sortear diversas trampas hasta llegar a descubrir lo que se esconde bajo las apariencias. Para ello, habrá de moverse por una topografía real y fantasmal a un tiempo, por un laberinto poblado de sorpresas y peligros, con lo que su pesquisa se convertirá en una aventura de iniciación y aprendizaje de la que saldrá radicalmente transformado.

Lo bueno de una novela es que todo cabe en ella, sea realidad o ficción. Y en El manuscrito de piedra el autor se toma la licencia que el protagonista sea Fernando de Rojas. Y tan mal no le ha ido cuando ha conseguido una saga de cuatro libros. Rojas es mundialmente conocido por su obra La Celestina, pero de su vida se conocen pocos detalles.  Por ello, Jambrina nos acerca a la ciudad de Salamanca y nos brinda una posible vida para ese escritor de una obra tan conocida.

Fray Tomás va en busca del obispo porque necesita confesarse. Justo a la entrada de la catedral es apuñalado sin poder pedir auxilio. Ante este suceso inesperado, el obispo Diego de Deza, manda llamar al bachiller Fernando de Rojas. Ve en él un gran investigador y le encomienda resolver la misteriosa muerte del religioso. Anteriormente demostró sus dotes frente a ladrones o incluso salvó la vida de su padre frente a la Inquisición. 

Rojas es un gran estudiante y uno de los alumnos más ilustres del Colegio Mayor de San Bartolomé. Estudia leyes, teología, medicina y astrología. También siente curiosidad por la botánica y la farmacia. Y de la mano del herbolario descubre la planta de tabaco, cuyas semillas las trajo Cristóbal Colón de sus viajes a América.

El bachiller debe investigar la muerte del catedrático en teología cuyo cadáver lleva una marca en la mejilla y una pequeña moneda en la lengua. No puede negarse al encargo del obispo, quien lo nombra "familiar supernumerario del Santo Oficio", para que tenga autoridad para investigar sin la obligación de dar explicaciones al comisario inquisitorial de Salamanca. Rojas insiste en que todo el mundo sabe que es converso, pero el obispo le incita a trabajar en silencio. Tanto por su situación como por la inminente llegada de los Reyes Católicos a Salamanca, donde no deben encontrarse con una ciudad insegura y llena de violencia.

Como un buen detective, Rojas, busca cualquier indicio que le acerque al asesino. Analiza el cadáver aplicando sus estudios de medicina pero los avances son mínimos. Parece que alguien va unos pasos por delante y todo parece no tener fin. Surgen nuevas muertes bajo un mismo patrón de las que no consigue identificar el motivo de ellas, porque las víctimas son de diversas clases sociales. 

El manuscrito de piedra está ambientado en la Salamanca del siglo XV. Una ciudad famosa por su catedral y su universidad, es por ello que estos dos edificios son grandes protagonistas de la novela. El autor es un gran conocedor de Salamanca y nos ofrece una visión fantástica de sus calles lluviosas, callejones sin salida, pasadizos secretos y bares y prostíbulos a rebosar.

Jambrina ha escrito una novela detectivesca con base histórica. Cuidando el lenguaje para acercarlo a la época sin que resulte forzado. Y lo hace combinando personajes reales con algunos ficticios que a través de sus diálogos y vivencias nos trasladan a ese mundo enfrentado de estratos tanto religiosos como de raza. 

El manuscrito de piedra es una entretenida obra protagonizada por el bachiller Fernando de Rojas. Donde juegan un papel importante la metaliteratura, las leyendas y los mitos en la mágica ciudad de Salamanca donde el cielo y el infierno se encuentran a un solo paso. Sin duda deseo seguir con las andanzas de tan ilustre estudiante.