LA NIÑA DEL FARO
JEANETTE WINTERSON
TRADUCCIÓN: ALEJANDRO PALOMAS
LUMEN EDITORIAL
208 PÁGINAS
SINOPSIS
Érase una vez un farero ciego y una niña huérfana...Así podría empezar uno de los muchos cuentos del señor Pew, el hombre encargado de cuidar del faro de un remoto pueblo de Escocia. Quien le escucha es la pequeña Silver, una chiquilla lista que acaba de perder a su madre y de ganar a un nuevo amigo, un hombre enamorado de las palabras y dispuesto a contar historias insólitas que se enlazan unas con otras en una trenza sin fin.
Sentada al lado del señor Pew, Silver llegará a saber cómo y cuándo se construyó el faro, y descubrirá a personas tan fascinantes como Stevenson, Darwin, y el reverendo Babel, un libertino lleno de ira y de amor por una hermosa mujer.
Cuando Silver crezca, los cuentos del señor Pew la acompañarán y harán de ella una lectora voraz, fascinada por los libros y por los cuerpos misteriosos que va encontrando en su camino.
Hay libros que como un efecto mágico llegan en el momento adecuado para enderezar el camino y dejar de andar en solitario por un bosque sin salida. "La niña del faro" llevaba años en la lista interminable de libros por leer y, no fue hasta este verano, en una visita a la biblioteca, que como la luz parpadeante de un faro llamó mi atención. El embrujo de los libros que buscan su momento, sin importar la tardanza, para dejar una huella imborrable.
La niña del faro es la historia de Silver, una joven huérfana, y del farero Pew, el mejor contador de historias. Silver vivía con su madre sobre la pendiente de un acantilado en Salts, un pequeño pueblo de Escocia. Al fallecer la madre, a causa de un accidente, la niña queda al cuidado de la señorita Pinch , una mujer insoportable que no duda en poner un anuncio para que alguien adopte a la niña. Entre todas las desgracias siempre aparece alguien con un gran corazón y este es el farero del cabo de la Ira que acepta a Silver y su perro Dogjim como compañeros de aventura.
"Tú no eres como los demás niños -decía mi madre-. Y si no puedes sobrevivir en este mundo, mejor será que te construyas uno propio".
Silver no proviene de una familia normal y su madre siempre le repetía que debía adaptarse a los imprevistos de la vida. Un gran consejo que también le enseñó Pew, hay que aprender a navegar con temporal. La familia del farero también es peculiar, desde siempre son los encargados de mantener la luz del faro, un trabajo que pasa de generación en generación. Lo extravagante es que todos ellos son ciegos, lo que demuestra que no hay nada imposible si uno quiere.
"Había dos Atlánticos, uno fuera del faro y otro en mi interior".
La oscuridad que habita dentro del faro se ilumina con la calidez de Pew, un personaje maravilloso especialista en contar historias. No solo le enseña a la niña el oficio de farera sino que la invita a imaginar e inventar cuentos. Y así ellos pasan a no ser los únicos protagonistas de la novela, los personajes ficticios y reales de los cuentos también tienen su sitio. Desde Darwin y Tristán e Isolda, con su teoría de la evolución, Robert Louis Stevenson con sus famosos doctor Jekyll y señor Hyde, y Babel Dark con su doble vida.
Cuéntame un cuento, Pew.
¿Qué clase de cuento, pequeña?
Uno con final feliz.
En el mundo eso no existe.
¿Un final feliz?
No, un final.
Jeanette Winterson es comparada como la nueva Virginia Woolf, por invitarnos nuevamente a entrar en una "habitación propia" y disfrutar con sus historias. Se agradece encontrar autoras con una prosa contundente y poética que saben sacudir al lector con emociones y palabras. Y todo ello sin seguir las pautas de una novela con su introducción, nudo y desenlace. Winterson crea su mundo y consigue enamorar a los lectores con sus cuentos, la imaginación y el maravilloso efecto del boca a boca.
La niña del faro es como una muñeca rusa, con un cuento dentro de otro cuento y cada uno con una intención y un significado distinto. Las historias juntas forman el universo Winterson, porque la palabra es el método de comunicación más importante y sensible del ser humano. No importan los finales ni el orden de los cuentos, es una delicia es leer a esta autora y dejar volar la imaginación por como lo cuenta. Nos regala una mezcla de cuentos infantiles con historias de tradición oral, lo que nos lleva a recapacitar sobre costumbres perdidas como son los contadores de historias y la función del farero que estaba todo el día pendiente de la luz del faro.
La novela es una maravilla y mucho mérito también es del traductor, Alejandro Palomas, que con su sensibilidad brinda en bandeja una historia inolvidable escrita por Jeanette Winterson.
La niña del faro es un libro que transmite mucho amor, paz y pasión por las palabras. Como en todo cuento hay maldad y soledad, pero como buenos navegantes seguiremos la luz y recordaremos a Pew que seguro nos guía hasta el cabo de la Ira para echar el ancla, observar las estrellas y escuchar sus maravillosas historias.
Una novela inolvidable llena de matices, metáforas y simbolismo que no me cansaré de recomendar. Un libro para leer y releer porque a todos nos gusta que nos cuenten historias, vivirlas y contarlas.
Como dijo Emily Dickinson, "La eternidad está hecha de ahoras".
Cuéntame un cuento, Pew.
Cuéntame un cuento, Silver.
Cuéntame mil y un cuentos, Jeanette Winterson.
Pues en otro momento no te hubiera dicho que no pero hoy por hoy no estoy para metáforas y simbolismo aunque este tipo de reseñas se me suelen quedar en el subconsciente y luego de pronto un día veo el libro en la librería y cargo con él.
ResponderEliminarUn beso
No sabes las ganas que le tengo a este libro y ahí sigue sin leer, qué desastre !
ResponderEliminarBesos.
Me pasa un poco como a Inés, te leo y veo que es una buena lectura pero ahora mismo no creo que la disfrutara.
ResponderEliminarUn beso
Desde luego lo cuentas fenomenal pero yo ando muy dispersa como para meterme con una lectura de este tipo.
ResponderEliminarBesos
Es un libro maravilloso y también en su día fue de mis mejores lecturas del año. Además ya verás cómo siempre lo vas a recordar así, intenso y entrañable. Pew ya no se irá.
ResponderEliminarBesos
No la conocía pero me llama mucho la atención. La buscaré.
ResponderEliminarBesotes
Lo tengo en casa y con ganas de leerlo. Pero no encuentro el momento.
ResponderEliminarPues has nombrado varios elementos que me tientan y uno de ellos es el nombre del traductor. Seguro que a una buena historia como esta él le ha añadido su sello. Lo tendré en cuenta. Besos
ResponderEliminarHace años que lo tengo en mente, a ver si me hago con él de una vez
ResponderEliminarBesos
Y tu en tu isla... desde luego un libro para todos pero para ti en especial.
ResponderEliminarGracias por la reseña, que bien que te gustara tanto, se nota que te fascinó :P
ResponderEliminarBesitos =)
Me lo apunto sin duda. Pinta genial lo que cuentas y bueno es tenerlo para leerlo en su momento.
ResponderEliminarBs.
A pesar de tu recomendación, no lo veo para mí.
ResponderEliminarBesos
Casi llego a comentarte, eh, jajaj.
ResponderEliminarPues mira, la historia en sí es preciosa, cuidada, lenta, elegante, y Silver te revuelve el estómago y el corazón. Pero si te soy sincera, la narración me ha dejado bastante fría. Creo que le ha faltado transmitir más emoción, y no me ha llegado tanto como a ti. Creo que se le podría haber sacado mucho más jugo.
Pero bueno, ya comentaremos más extensamente.
Un abrazo y gracias de todas formas por habérmela dado a conocer.
Pues es otro de mis eternos pendientes con el que espero no tardar mucho en ponerme al día. Me alegro de que te haya gustado . Un besote!
ResponderEliminarAhora mismo no me apetece una historia así, creo que no le sacaría jugo
ResponderEliminarBesos
Apuntadísimo =)
ResponderEliminarBesotes
Pese a que has disfrutado con su lectura, no me termina de convencer. Tanta metáfora y simbolismo no me atrae, y todavía menos si hay prosa poética de por medio. Besos.
ResponderEliminarLo tengo en casa pendiente hace ya un pàr de años, a ver si me pongo porque sé que me iba a gustar
ResponderEliminarUn beso!
Holaa
ResponderEliminarNo lo conocía de nada pero lo que nos cuentas en la reseña me gusta ^^
Un besito